Los Ángeles / Londres,

A. M. G. / E. F.-P.

Shaheen Jafargholi, de 12 años y nacido en Swansea, en el sur de Gales, fue invitado por la familia Jackson al funeral del artista. Ayer, en el escenario del Staples Center cantó «Who's lovin you» y al acabar agradeció a Michael «haberme bendecido a mí y a muchos otros». Cuentan que el cantante vio en «Youtube» la actuación de Jafargholi en el programa «Britain's Got Talent» y quedó deslumbrado.

Tras recibir la proposición de la familia Jackson para que participara en el homenaje al rey del pop, Jafargholi declaró a «The Sun»: «Michael fue una gran inspiración para mí. Estoy nervioso, pero me siento también honrado de poder actuar aquí».

En el mediático funeral público, televisado y transmitido en directo por internet a todo el mundo, intervinieron personalidades como el activista por los derechos humanos Al Sharpton, que se refirió a Michael Jackson como «un pionero en la defensa de los derechos de los afroamericanos». Incluso le atribuyó el mérito de que Estados Unidos tenga hoy un presidente negro. Mientras Sharpton se dirigía al auditorio, una frase del cantante se proyectaba en el fondo del escenario: «No hay nada que no pueda lograrse si alzamos nuestras voces en una».

Bernice King, la hija de Martin Luther King, contó cómo Jackson hizo sonreír a su madre, que sufría una embolia. A juicio de Bernice, «Michael era la realeza de Estados Unidos y su música tenía un efecto calmante». El discurso más político fue, lógicamente, el de la congresista Sheila Jackson Lee, que entregó a la familia «un certificado del Congreso que lo declara una genuina leyenda americana». «Yo nombro a Michael Jackson un buen samaritano, era una buena persona», declaró.