Oviedo
Salvando todas las distancias, lo que hace Dolores Medio (la novela fue terminada en Madrid en octubre de 1950) lo hizo muchos años atrás Leopoldo Alas con su Regenta en 1884. El Oviedo de Clarín es el Oviedo de «Nosotros los Rivero», con unas cuantas décadas de por medio, ecosistema social inconfundible, periférico y hermoso, pero también maldiciente y cruel con la desgracia ajena.
«Oviedo es una ciudad dormida». Así empieza la novela ganadora del premio «Nadal». «La heroica ciudad dormía la siesta», empezaba «La Regenta», novela más ácida que «Nosotros los Rivero», con la que comparte diagnóstico urbano y social.
«Nosotros los Rivero» está estructurada en dos partes. En la edición que ahora pone a disposición de sus lectores LA NUEVA ESPAÑA el primer tomo recoge en 144 páginas la primera parte y el inicio de la segunda. Para el segundo libro que completa el título y que será distribuido el domingo día 17, otras 144 páginas completarán los treinta capítulos de una novela que se ha ganado un puesto de privilegio en la narrativa española de la segunda mitad del siglo XX.
Junto a Dolores Medio y Clarín, la Biblioteca de Autores Asturianos de LA NUEVA ESPAÑA incluye clásicos como Jovellanos, Ceán Bermúdez, Ramón de Campoamor o Armando Palacio Valdés. El teatro estará representado por «La dama del alba», de todo un patriarca de la dramaturgia como es el cangués Alejandro Casona, mientras que la poesía cobrará especial protagonismo con las obras seleccionadas de Juan Acebal, Teodoro Cuesta, Félix de Aramburu y la «Antología poética» de Ángel González.
Son sólo algunos de los títulos y nombres propios que componen una colección imprescindible como ejemplo selecto de las letras asturianas.
