El académico Alonso Zamora Vicente -esposo de la filóloga asturiana María Josefa Canellada- publicó hace más de quince años una completa historia de la Real Academia Española (RAE), en cuya actualización trabajó hasta su muerte en 2006. Una edición puesta al día y ampliada de aquel libro se presentó ayer en la sede de la institución de la lengua, en Madrid, para celebrar los tres siglos de su nacimiento.

Ésta nueva edición de "La Real Academia Española", coeditada por la RAE y la Fundación María Cristina Masaveu Peterson, actualiza la original de 1999 a partir de las anotaciones del propio autor y se completa con el aporte de datos necesarios para completar el acontecer académico hasta finales de 2014. Incluye una importante renovación fotográfica, además de algunos capítulos que reflejan los cambios en el trabajo de la Academia, entre los que destacan los derivados de la incorporación de nuevas tecnologías. Pero el libro resuelve además otra carencia elemental: no quedaba ningún ejemplar disponible de aquella primera edición de la obra de Zamora Vicente, como ayer puso de relieve Fernando Masaveu, presidente de la Fundación Cristina Masaveu.

El propio director de la RAE, Darío Villanueva, traza en el prólogo la gestación del libro: "Alonso Zamora Vicente ejerció como secretario durante dieciocho años y cuando renunció al cargo en 1989 se entregó con toda generosidad a elaborar la primera historia de la Real Academia Española, que vería la luz finalmente diez años después, a las puertas ya del nuevo siglo. No contento con ello, siguió trabajando hasta poco antes de su fallecimiento, acaecido en 2006, en una nueva edición para la que dejó copiosas anotaciones, finalmente depositadas en su archivo personal, reunido en Cáceres por la Fundación Biblioteca Alonso Zamora Vicente". Así, gracias a la colaboración de dicha fundación y el esfuerzo del documentalista Mario Pedrezuela Fuentes se ha hecho posible, finalizaba el director de la RAE, "la renovada vigencia de esta historia de nuestra tricentenaria Academia tal y como era el deseo de su autor". Zamora Vicente, -que se incorporó a la RAE en 1967, cuando tomó posesión de la 'Silla D- fue, en palabras de Villanueva, "un filólogo de una pieza: hablante que escuchaba con toda atención; lector de literatura, que la escribía también; estudioso del lenguaje en todas sus manifestaciones, y entre ellas la literaria".

Fernando Masaveu destacó que "La Real Academia Española" es "una obra de referencia puesta al día, de forma que continuará siendo instrumento de disfrute y utilidad para todos los que se acerquen a la misma desde cualquier perspectiva".

Según los encargados de dar vida a esta nueva edición, el texto ha sido revisado y adaptado a las últimas normas ortográficas publicadas por la RAE, a la vez que se ha elaborado un extenso índice onomástico. Además, tanto Villanueva como Masaveu han destacado el proceso de la selección de las fotografías y elementos gráficos que enriquecen el texto. "Se han añadido imágenes y retratos ausentes en la edición anterior, y se han incluido nuevos elementos visuales que contribuyen a hacer de ella una publicación de gran plasticidad y modernidad".

El académico Manuel Seco, amigo de Alonso Zamora Vicente, elogió la labor del autor. "Como era característico de los discípulos de Menéndez Pidal, de los que Alonso Zamora decía ser ya 'el último representante vivo'", afirmó Seco, "dedicó su devoción tanto a la lengua como a la literatura. 'La Real Academia Española' es sin duda lo más documentado y más atractivo que se ha escrito sobre la institución".