Oviedo, E. F.-P.

«Exigimos que se vuelva a contratar a los trescientos profesores que la Consejería de Educación ha dejado sin empleo; son personas que están trabajando y haciendo una labor que es necesaria; sin hacer nada estaba la legión de asesores del consejero Riopedre». Ésta es la actitud con la que el PP tomó partido, ayer, en la confrontación que mantienen los profesores y la Administración del Principado.

Gabriel Díaz, presidente de la comisión de educación del partido, calificó de «inadmisibles» y de «tomadura de pelo» las argumentaciones del responsable regional de Educación, Herminio Sastre, y reclamó «el cese del director general de Personal Docente, Alberto Muñoz», porque, añadió, «o lo hacía mal antes, con Riopedre, o lo está haciendo mal ahora».

«Echan al paro a trescientos titulados asturianos, altamente capacitados, y no les importa. Los que generaron ese problema siguen en sus cargos», expuso Díaz. «En junio, al acabar el curso, el PP ya dijo que se vaticinaban recortes importantes en educación, recortes que afectan a las familias, no a las subvenciones de los amigos y los chiringuitos», continuó.

El portavoz de educación del PP teme las consecuencias de lo que denomina «política de tierra quemada» de los actuales dirigentes del Principado, con las que tendrán que bregar quienes ocupen su lugar tras las elecciones. «A Areces le importan poco Asturias y la educación de Asturias», opinó.

Gabriel Díez dirigió duras críticas al consejero de Educación, por sus últimas declaraciones sobre los recortes en la enseñanza. «¿Que había exceso de personal? Entonces lo que había era un desgobierno y resulta que el equipo que lo gestiona sigue siendo el mismo», cuestionó. «Dice que ha mejorado la eficiencia del sistema, eso es absurdo y tampoco es verdad que se estén atendiendo las demandas de los centros».

Más aun, el parlamentario popular acusa abiertamente a la Administración regional de mantener «un continuo engaño» y responsabilizó de ello al «tándem Riopedre-Areces».

La comisión de educación del PP, informó su presidente, mantendrá una reunión al día siguiente de la apertura oficial del curso, el próximo viernes por la tarde, para analizar en qué situación quedan los centros y sopesar si es necesario adoptar alguna iniciativa al respecto.