Una parte importante de la Junta Directiva del Museo de Bellas Artes de Asturias, el órgano gestor de la fundación que dirige la pinacoteca asturiana, se muestra reacia a la pretensión del PP de cobrar entrada para ayudar a la financiación de la institución. Un rechazo que es especialmente marcado entre los patronos que representan a las fuerzas de izquierda. Los representantes ovetenses de IU y Somos en el patronato piden que se revise el modelo de financiación del Museo para que el Gobierno regional socialista "haga un esfuerzo" y aumente su aportación.

Los populares defenderán su propuesta en el día de hoy, durante el Pleno de la Junta, en el que interpelarán al gobierno que preside Javier Fernández, sobre qué medidas se prevén tomar en relación al Museo. Mas en el seno de la Junta de Gobierno de la institución hay un rechazo importante a una medida que puede derivar en una reducción de visitantes.

Ni la dirección del Museo ni los representantes del gobierno autonómico, que reservan sus valoraciones para el Pleno, se han manifestado sobre la propuesta del PP. Pero otros patronos sí, y de manera bastante nítida. "Me parece una brutalidad. El Bellas Artes tiene que ofrecer a su ciudadanía las obras de forma gratuita. El PP tiene una gran contradicción, que es bajar los impuestos a los ricos y recuperar esos impuestos cobrando entradas al mundo de la cultura", afirma el edil ovetense Roberto Sánchez Ramos, "Rivi" (IU), que ostenta además la vicepresidencia de la Junta Directiva de la pinacoteca.

Su opinión es compartida por los otros representantes del tripartito ovetense. Así, Ana Taboada, de Somos Uviéu, señala que "en principio no procede" cobrar entrada. "El acceso a la cultura, cuanto más libre sea, mejor. Cercenar ese acceso con una entrada, aunque sea simbólica, no es positivo", reflexiona Taboada, que defiende el papel del Museo en la difusión del arte y su explicación "a cualquier persona con independencia de su condición social".

La también edil ovetense Marisa Ponga, representante del grupo municipal socialista, se muestra cauta, a la espera de conocer "la letra pequeña", aunque matiza que "no considero que el acceso gratis tenga un carácter peyorativo".

Otra cosa, plantean los representantes de IU y Somos, es el modelo de financiación del Bellas Artes, que coinciden en que habría que revisar. "Hay un compromiso serio y claro del Ayuntamiento de Oviedo, con una aportación bastante importante para la financiación del Museo. Otra cosa es el compromiso que otras entidades administrativas, que tendrían que hacer un esfuerzo para que el Bellas Artes no sufra los recortes", afirma Taboada. "Los problemas del Museo no se solucionan cobrando entradas, sino con más financiación", añade "Rivi".

Otros patronos también se muestran reacios a cobrar entradas. El crítico y comisario de arte Luis Feás se manifestó a través de las redes sociales, en las que afirmó que los populares "aciertan en el diagnóstico, pero equivocan la solución: el copago restringirá las visitas. Hay que exigir al Principado que aumente su aportación, reducida a un tercio con respecto a 2009". Por su parte, el jurista Leopoldo Tolívar y el historiador Javier Fernández Conde defienden la gratuidad "mientras se pueda mantener", aunque reconocen que hay que buscar vías de financiación alternativas.

Más allá del patronato, otros colectivos se muestran abiertos a debatir el cobro de entradas. David Estévez, vicepresidente de la Asociación Profesional de Informadores Turísticos de Asturias (APIT), señala que, si bien el colectivo no tiene una posición oficial, ya que aún no se ha debatido la propuesta, en su opinión el cobro de una entrada podría tener un beneficio adicional: "Podría servir para poner en valor el Bellas Artes: quizás al ser gratuito, no se le da la atención debida".