La presentación de "Llazarín de Tormes" en asturiano traducido por Pablo Suárez comenzó con un "escrache" al consejero de Cultura, Genaro Alonso, por parte de un grupo de las Asambleas de Estudiantes de la Universidad de Oviedo. Los estudiantes exigieron la bajada de tasas universitarias y para ello pidieron un debate al Consejero, quien dijo que no era el momento ni el lugar, que acudía a "presentar un libro" y que estaban boicoteando el acto. Los jóvenes explicaron a Alonso que hay 15 países en la UE que tienen la tasas más bajas, insistieron en debatir con el Consejero y lo acusaron al PSOE de incumplir su programa.

La presentación de "Llazarín de Tormes" (editorial Laria) se celebró en el RIDEA, en Oviedo. Genaro Alonso dijo que la llingua es milenaria, que nadie tiene derecho a obstaculizarla y que todos tienen el deber de cuidarla. Y añadió al respecto de la normalización que "las lenguas son la solución no el problema".

Con el Consejero compartieron el acto la presidenta de la Academia de la Llingua, Ana Cano; Xuan Xosé Sánchez Vicente, prologuista de "Llazarín de Tormes"; la escritora Vanessa Gutiérrez y el editor Juan Carrio. Todos ensalzaron la labor del traductor, quien dijo que el objetivo debe ser crear un corpus grande de obras en asturiano de la misma forma que hicieron otras autonomías históricas.