George Miller, director de "Mad Max: Fury Road", ha demandado a la firma que produjo la película, Warner Bros., por incumplimiento de contrato. Según sostiene Miller, la productora norteamericana acordó con él un bonus de siete millones de dólares (seis millones de euros, al cambio actual) si el "coste neto final" del filme no superaba los 157 millones de dólares (134,5 millones de euros). Aunque el coste superó finalmente esa cifra, Miller alega que fueron las decisiones de la Warner las que provocaron el sobrecoste, por lo que entiende que le corresponde recibir el bonus. El caso se juzga ante la Corte de Nueva Gales del Sur (Australia).