El reputado artista y profesor chino Xu Zhenglong se quedó ayer fascinado con la obra del franquino Herminio, sobre todo porque, a su juicio, ha sido capaz de hallar "el punto perfecto de unión entre la belleza, la naturaleza y la ciencia". Esta lectura gustó al propio Herminio, que se encomendó a la misión de guiar a un grupo de nueve escultores chinos por los misterios y la magia de su trabajo.

Esta particular "cumbre" artística se enmarca en la actividad de la Asociación Pro Centro de Cultura y Arte China-Occidente (CCACO) que, como defendió su presidenta, Longling Yu, busca "crear un puente de intercambio de cultura y arte entre China y España". La delegación China lleva ya unos días en el país, en concreto en la localidad palentina de Cervera de Pisuerga, donde se están celebrando las cuartas Jornadas de arte y cultura china.

Zhenglong explicó a preguntas de LA NUEVA ESPAÑA que se lleva a casa la singular combinación entre naturaleza y ciencia que presentan las obras del franquino, llenas de una "energía que no se toca". "Ciencia y arte no son contrarios", defendió, al tiempo que se comprometió a fortalecer los vínculos con los artistas españoles y, sobre todo, a hacer que la escultura española se conozca en el gigante oriental. "La pintura española tiene muchísima fama en China, pero hace falta hacer famosa también a la escultura", precisó Longling Yu, a la que le tocó además ejercer de traductora.

En el encuentro estuvo muy presente, sin estar, el escultor canario Martín Chirino. Es presidente de honor de la CCACO y se empeñó en orquestar un encuentro con los escultores chinos y Herminio, al que, como ayer señaló su hija Marta, admira mucho. "Herminio y mi padre se conocen desde hace cinco años y han mantenido una relación muy estrecha. Siempre se queda asombrado con su obra y quería abrir fronteras y dar a Herminio la importancia que tiene", apuntó. Estaba previsto que Chirino, asiduo visitante tapiego, estuviera en la jornada pero un problema de salud se lo ha impedido. "Está un poco mejor y más animado", comentó su hija, si bien reconoció "la pena tremenda" que le dio no estar presente en La Caridad.

El crítico de arte de LA NUEVA ESPAÑA, Rubén Suárez, no dudó en calificar de "genio" a Herminio, al que definió como "uno de los creadores del cinetismo internacional, uno de los grandes maestros". Por eso aplaudió la idea de esta visita: "Hace muy bien el arte chino en venir a España, uno de los grandes países de la escultura contemporánea. Enhorabuena por haber tenido esta sensibilidad y haber visto la importancia de la obra de Herminio". Fascinados con el trabajo del franquino también quedaron los artistas palentinos José Javier Castillo y Susana Blanco: "Es fabuloso como persona y como artista es sorprendente. Tenía que estar mucho más reconocido".

Los nueve chinos participantes no son solo escultores, sino también profesores de universidades y escuelas de arte del país. Y uno de ellos, Meng Xiangke, es además descendiente del conocido pensador chino Confucio, en concreto pertenece a la 75 generación de descendientes.

Hoy el grupo visita Oviedo, donde está prevista una recepción en el Ayuntamiento y una visita al museo de Bellas Artes y el casco antiguo.