La búsqueda de trabajo a través de internet o la realización de cualquier gestión en la web se topa, en no pocas ocasiones, con comportamientos sancionables de quienes ofrecen los servicios o de quienes los buscan. No es nada nuevo. En este enlace te contamos hace tiempo la conversación que tuvo que aguantar una chica que había recurrido a BlaBlaCar para hacer un viaje en coche compartido. Esta vez la que ha sufrido una actitud machista más que criticable ha sido una joven vecina de Alicante que se ofrecía para dar clases particulares o para hacer de niñera. La propia joven, de 18 años, se definía en su anuncio como una persona "muy simpática y responsable". Estudiante de Educación Infantil quería combinar su trabajo con los estudios para así poder sacarse un dinero. Pero no fue fácil.

En el anuncio la joven daba su número de Whatsapp. Y eso fue lo que catapultó los vergonzosos mensajes que le llegaron luego. "Primero me llamó un hombre dándome unas condiciones realmente extrañas para cuidar de un niño. Tras mucho tiempo hablando con él le dije que no me interesaba y colgué. A los cinco minutos llamó y tuve que amenazar con denunciarlo para que parara, decía que iba a seguir llamándome", comienza su relato esta joven que ha hecho público su caso en un hilo de Twitter. Pero esa llamada no fue la única. Luego se encontró con otra proposición. Querían ofrecerle trabajo de modelo, quería que posara desnuda por unos 160 euros la sesión. No fue el único fotógrafo. Poco después le llegó un mensaje similar. Pero sin duda el que dejó con la boca abierta a esta solicitante de trabajo fue el tercer whatsapp.

"Mi pareja y yo buscamos abrir la relación", le confesó una joven que dijo tener 22 años pero que según la chica que relata la historia "aparentaba mucho más en su foto". Al rato volvió a llegar otro mensaje con contenido sexual por Whastapp. "He visto que buscas trabajo, pareces muy guapa, estoy buscando una chica para ser amigos especiales y vernos todas las semanas. Gratifico por cada cita con 150 euros por cita" asegura el demandante que se define como "gente seria".

La avalancha de mensajes fue tal que hasta hubo quién le ofreció trabajar en el cine para adultos. "Buscamos una chica como tú son sesiones que se pagan al momento entre 300 y 400 euros, si te interesa te informo", le dijo un supuesto productor. La chica relata todo esto con el único objetivo de dar a conocer una realidad y parece que en parte lo está consiguiendo. Más de 5.000 personas han compartido ya en Twitter su historia que se ha hecho viral y está haciendo que muchos se planteen de verdad los problemas a los que se enfrentan las chicas jóvenes a la hora de buscar trabajo.