Seguramente que con la llegada del frío y las lluvias del invierno tengamos que usar más ropa que de costumbre y lavar y secar más que nunca. Además, si la lluvia nos pilla de improviso y llegamos a casa pingando no tenemos otra solución que secar lo que llevábamos puesto. Si no tienes una secadora puedes hacer uso de estos trucos que te vamos a descubrir. Todos tenemos un tendal en casa y lo normal es acercar la ropa a radiadores o estufas, pero esto puede llegar a ser peligroso y es desaconsejable.

Si tenemos mucha prisa podemos enrollar la ropa en una toalla grande para así acelerar el proceso de secado. Un secador de pelo nos puede ayudar en algún momento siendo un remedio casero eficiente si lo que necesitamos secar es pequeño o tenemos mucha prisa. Usar el congelador también puede ser una solución, aunque quizás esto sea algo demasiado extremo. Lo que tenemos que hacer es colocar la prenda dentro de una bolsa que podamos sellar e introducir dentro del congelador.

Hay que evitar cubrir radiadores o estufas con prendas de ropa pues si nos despistamos, aunque solo sea un segundo podemos acabar teniendo un pequeño problema y terminar quemando la ropa e incluso terminar por sufrir un incendio.

También podemos aprovecharnos del centrifugado de nuestra lavadora para que esta nos ayude a quitar el exceso de agua. Tenemos que tener en cuenta el tejido de la ropa que estamos secando. Un truco extra es el de introducir una gran toalla en la lavadora para que también aspire el agua sobrante.

¿Qué ropa no debemos introducir nunca en la secadora?

Lo primero que debemos hacer es atender bien a las instrucciones de las etiquetas de las prendas de ropa. Hay tejidos que a altas temperaturas terminan por estropearse como la lana, el lino o los sintéticos. No podemos meter calzado con suela de goma, porque se derrite y tampoco ropa deportiva con plásticos o membranas. Los paños o las gamuzas que puedan tener rastros de materiales inflamables como pintura o alcohol tampoco deben introducirse en la secadora.

Para sacar el mayor rendimiento a nuestros secados debemos agrupar nuestra ropa por tipos, la ropa de cama y la ropa de baño pueden ir juntas, mientras que las camisetas y los jerséis también pueden hacerlo. No debemos olvidar revisar todos y cada uno de los bolsillos y anudar todos los cordones. Debemos darles la vuelta a los pantalones, los jerséis y las camisetas. Mezclar prendas grandes y pequeñas también ayuda pues así el aire se reparte de mejor manera por el tambor de la secadora. Recuerda sacar la ropa nada más termine el secado, si no lo hacemos corremos el riesgo de que nuestras prendas cojan formas difíciles de cambiar una vez se resequen. Si tenemos mucho que secar debemos aprovechar el aire caliente de la primera tanda para así ahorrar en electricidad. El mejor consejo es utilizar nuestra secadora en horarios de tarifa reducida