Tanto el horno como los cristales son difíciles de limpiar. Necesitas conocer ciertos trucos para tenerlos a punto si no quieres pasarte horas y horas con la bayeta a cuestas. Y uno de esos te lo desvelamos hoy. ¿Sabías que puedes usar el agua oxigenada para limpiar el horno, revivir viejas sartenes o dejar el espejo como nuevo? Pues no desprecies lo que puedas hacer con esta “sustancia” que tienes en casa y a la que no sueles prestar excesiva atención.

Si te han quedado manchas en ollas o sartenes haz una pasta con agua oxigenada y bicarbonato. Frota sobre la suciedad, deja reposar y luego remueve con una esponja y agua caliente.

Si usas agua oxigenada y agua del grifo a partes iguales puedes tener una mezcla que, introducida en un vaporizador, puedes usar para limpiar el horno, los espejos y los azulejos. No te dejará huella alguna ni te hará que se gaste demasiado ninguno de estos objetos. De todas maneras no todos los espejos son iguales. Prueba la mezcla (que puede ser incluso más efectiva si usas en lugar de una bayeta un papel de periódico) y comprueba tú mismo los resultados verás si te convence y si puedes seguir utilizando este truco o prefieres buscar otros.

Recuerda que periódicamente en nuestra sección de Decoración tienes todos los trucos de limpieza que necesitas en tu día a día para mantener tu casa a punto. Tenerlo todo listo no requiere ni que tengas mucho tiempo libre ni que te gastes mucho dinero en productos. Los propios especialistas en limpieza recomiendan cada semana los trucos de limpieza que recogemos en nuestra sección de Decoración y que te ayudarán a llevar una vida más sana e higiénica.

En este enlace puedes ver, por ejemplo, cómo se limpia bien un horno. En este otro te recomendamos un producto que va a dejar como nueva tu mampara de la ducha. No en vano es una de las zonas de la casa que más se nos ensucian. No solemos prestarle demasiada atención y el agua y la cal del día a día. Por eso necesitas tener tus pequeños trucos. Y los mejores productos. En este enlace te contamos, por ejemplo, lo que puedes usar todos los días para que te quede la mampara limpia y como nueva y no tengas que gastar mucho tiempo en limpiarla.