Juan Cuatrecasas, el presidente de la Asociación Infancia Robada, integrada por víctimas de pederastia del clero y por sus familias, calificó de "cordial" su primer encuentro con la Conferencia Episcopal Española. Ayer, Cuatrecasas y otros representantes de la asociación compartieron dos horas de almuerzo con el presidente de la Conferencia, Ricardo Blázquez. Durante el encuentro, el cardenal les adelantó que el vademécum del Papa, con medidas concretas de actuación en casos de pederastia, estará listo muy probablemente a principios de abril.

Aunque, según refirió Cuatrecasas, el encuentro discurrió en un "tono conciliador", no se produjo "ningún compromiso" por parte de la Iglesia, razón por la que los miembros de Infancia Robada mantienen su escepticismo.

Cuatrecasas se alegra de que al referirse a los abusos cometidos por sus sacerdotes, la Iglesia haya dejado de hablar de pecados y admita que son delitos. Infancia Robada pone como ejemplo a seguir el de la comunidad jesuita de Cataluña, que ha abierto una investigación sobre los actos de pederastia que hayan podido cometer sus miembros. En la reunión de ayer las familias pidieron a la Iglesia indemnizaciones y medidas de acompañamiento para las víctimas, tanto educativas como sociales y jurídicas.