Un camionero de nacionalidad británica ha sido arrestado en el puerto Tánger Med, en el norte de Marruecos, cuando intentaba sacar del país ilegalmente 100.000 mascarillas de protección, muy codiciadas actualmente con la expansión del coronavirus. El camionero pensaba llevar estas mascarillas a su país para revenderlas a un precio cercano a los 30 euros cada una. El valor de esta mercancía confiscada ha sido estimado en 30 millones de dirhams (3 millones de euros). El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha mostrado "preocupación" por la "grave y creciente" escasez de suministros de equipos de protección personal sanitario, como guantes, máscarillas, respiradores, gafas, protectores faciales, batas y delantales. La OMS ha achacado esta falta de material al "aumento de la demanda, el acaparamiento y el mal uso".
