El Gobierno francés anunció que, para intentar prevenir nuevos contagios de coronavirus, se prohiben a partir de ahora las concentraciones de más de mil personas, salvo algunas excepciones que se consideren "útiles" como manifestaciones, el transporte público o los exámenes de ingreso. El ministro de Sanidad, Olivier Véran, informó de que se ha decidido bajar la actual barrera de las 5.000 personas para las reuniones de gente hasta las 1.000 para evitar la propagación del coronavirus. El Gobierno decidió mantener el nivel 2 de alerta, aunque el paso al nivel 3, el de la epidemia por todo el país, se considera "inexorable".