Isabel Sánchez regresó a Asturias vía Madrid. "Pero el viaje comenzó en Punta Cana", explicó nada más traspasar la puerta de llegadas, arrastrando dos "trolleies", con una mascarilla tapándole la boca. "Nos dijeron en el hotel en que estábamos que no iban a recibir más asturianos, más españoles, que los vuelos se habían suspendido", añadió. "Pero con toda normalidad, porque allí, en la República Dominicana, apenas tienen afectación del coronavirus. No miran para él", comentó. El primer caso de coronavirus en Santo Domingo es el 1 de marzo: un italiano.
Sánchez y Alejandra Rodríguez viajaron desde Punta Cana a Madrid donde cogieron el vuelo de Air Europa de las 15.50 horas. A las 16.15 horas aterrizó en Santiago del Monte. "Era un avión pequeño, de unos sesenta asientos. Debía de venir con poco más de la mitad", aclaró Rodríguez.
Juan Díaz, que también inició su periplo en la isla caribeña, lo que de verdad quería echar un pito a gusto. Así atendió a LA NUEVA ESPAÑA. "Allí pasan del coronavirus", destacó. "Dejo tranquila la isla, calentita, no con este frío...", bromeó. Díaz es de Oviedo, viajó a Santo Domingo por trabajo. Lo hizo bajo la mascarilla "por prevención".
Miguel González regresó a Asturias desde Madrid, pero vía Ámsterdam, que es donde trabaja. "No tuve un sólo problema. Allí, en Holanda, menos. No sé cómo está Madrid: no vi nada, lo que tardé en cambiar de avión. A ver qué va a pasar ahora", recalcó González, el primero en escapar de la puerta de llegadas en busca de un coche que le devolviera a casa.
En el avión de Madrid también viajó un hombre que llegaba de Indonesia, pero que prefirió el anonimato. "He tomado cinco aviones: en ninguno de los aeropuertos me han medido la temperatura", se lamentó. La temperatura -la alta temperatura por ser precisos- es uno de los síntomas primeros de haber podido contraer coronavirus. Cinco aviones para recorrer medio mundo desde el país de las especias pasando por la península Arábiga. "Estoy bien", aseguró bajo la mascarilla y junto a su familia, que le había estado esperando en la puerta de llegadas del aeropuerto asturiano.
La ciudad de Madrid ha sido sitiada por el virus chino. Los asturianos que regresaron a casa desde la capital lo hicieron ayer a media tarde sin haber pisado la ciudad en la que bares, terrazas, colegios, institutos, teatros, polideportivos y demás cierran con el fin de contener el número altísimo de infecciones que el Gobierno de España pronostica que vivirá el país entero a partir de la semana que viene.
