Un tercer trabajador de la cárcel de Asturias ha resultado positivo en coronavirus, según fuentes sindicales. Otra funcionaria, la cuarta, está pendiente de los resultados de los tests para determinar si sufre la enfermedad. Se trata de trabajadores de vigilancia interior de la prisión. Los trabajadores disponen de una sola mascarilla para estar en el interior de la prisión, lo que está preocupando mucho tanto a los funcionarios como a los reclusos.

A raíz del nuevo positivo, ha comenzado a aplicarse en el centro un sistema para reducir la presencia de un número elevado de funcionarios de interior en un mismo departamento o módulo. Una vez presentados en el centro los funcionarios que figuren en el libro de servicios, el director determinará cuántos funcionarios pueden ausentarse quedando disponibles en su domicilio si son requeridos.

Entre los reclusos está creciendo el malestar por la falta de contacto con sus familias y el riesgo de contagio. Un grupo de familiares ha pedido que se excarcele a los reclusos de tercer grado para que cumplan el confinamiento en casa con sus familiares.