El Museo del Prado reabrirá al público el próximo 6 de junio con sus instalaciones adaptadas a las nuevas condiciones de seguridad, entre ellas la mejora de la calidad del aire con una certificación similar a la que tienen hospitales, clínicas y laboratorios. La pinacoteca, la más grande de España y la quinta en superficie del mundo, ha realizado una serie de mejoras en el sistema de climatización con recomendaciones especificas ante la pandemia de covid-19.
El esfuerzo para adaptar la calidad del aire a la certificación de calidad que tienen los hospitales, junto al establecimiento de aforo diario, permitirá disfrutar de nuevo de la visita al Museo Nacional del Prado "con todas las garantías de salubridad", según hacen constar los responsables del museo en un comunicado difundido ayer.
El museo reabrirá con una cuarta parte de su espacio y un tercio del aforo. Solo podrán visitar la pinacoteca 1.800 personas cada día. El pasado mes de febrero, la media de visitas diarias se acercaba a 9.000 visitantes.
Además de la reducción del aforo, la pinacoteca instalará controles de temperatura corporal en todos los accesos, será obligatorio llevar mascarilla, habrá dispensadores de gel hidroalcohólico y la distancia entre visitantes deberá ser de dos metros, como mínimo.
No se podrán usar los ascensores, salvo las personas que vayan con bebés o que tengan alguna discapacidad, ni tampoco habrá consigna ni audioguías.
Todas las entradas, incluidas las gratuitas, deberán ser adquiridas a través de la web y solo servirán para una determinada franja horaria.
La pinacoteca mantendrá su horario habitual, excepto los domingos, que cerrará dos horas antes, a las cinco de la tarde en lugar de las siete como hacía hasta marzo.
El plan de contingencia del Prado estará en vigor, en principio, hasta el próximo 15 de septiembre de 2020, aunque el propio museo ha precisado que esa es una fecha meramente estimativa, y se pone en marcha con el objetivo de "garantizar la seguridad y protección de los empleados del museo y de sus visitantes".
Junto al Museo del Prado, el 6 de junio también reabrirán sus puertas a los visitantes el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, en el que en esta fase solo se podrá visitar la colección permanente, y el Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, que permitirá acceder a su colección permanente y a las dos exposiciones temporales prorrogadas, la de Rembrandt y la de Joan Jonas.
