El aumento sin control del número de contagiados por coronavirus en la ciudad de Orense ha llevado a la Xunta de Galicia a imponer nuevas restricciones y más duras a todo el término municipal, sobre el que pesa además la amenaza tomar decisiones todavía más drásticas en los próximos días, sin descartar un confinamiento perimetral en caso de que las nuevas medidas no aplanen la curva de la infección. Desde esta medianoche, en toda la capital de la provincia quedan prohibidas las reuniones de personas que no sean convivientes, en espacios públicos o privados. Es la primera ciudad de España donde se aplica una medida de este calado tras el estado de alarma.

La decisión se tomó ayer de urgencia tras la evaluación de la situación que realizó el subcomité clínico de Galicia para la pandemia. El martes tocará revisión de la evolución para decidir si se mantienen las restricciones o se añaden otras más. Ya son 19 las personas fallecidas en esa segunda ola en Orense, ciudad en la que se registran 850 casos activos de Covid-19.La tasa de incidencia (72 casos por 100.000 habitantes en los últimos tres días y por encima de 160 a siete días) triplica la del conjunto de Galicia y los contagios siguen en "constante aumento", lo que lleva a Sanidade a determinar que pese a las medidas impuestas hasta ahora, el brote "evoluciona claramente en sentido negativo".