La consejería de Cultura del Principado quiere declarar Bien de Interés Cultural (BIC) la colección de arte de Liberbank, entre 3.000 y 8.000 obras, y para ello busca "una grieta jurídica", según explicó la consejera de Cultura, Berta Piñán.

El problema es que Cultura se encuentra en un proceso que Piñán describió como "la pescadilla que se muerde la cola". Cultura ha solicitado a la entidad bancaria un catálogo de esas obras ya que el último data de 1996 y por tanto es incompleto. El Principado ya había hecho esa solicitud en 2017 pero no obtuvo respuesta, según explicó Piñán. Ahora Liberbank sí ha respondido a una nueva petición desde Cutlura. La entidad financiera expone que entregará el catálogo de obras cuando el Principado instruya el expediente para su protección. "Pero necesitamos el catálogo para instruir el expediente y saber lo que queremos proteger", apostilló Piñán. De ahí, como subrayó en dos ocasiones la consejera en su comparecencia en la Junta General del Principado, que se esté buscando "una grieta jurídica" para que el banco tenga que entregar el catálogo de obras y así poder iniciar el expediente.

La intención de la consejería es clara, proteger la colección. Se podría hacer, explicó Piñán, mediante la declaración del conjunto, una parte o las obras más destacadas, como bien de interés cultural. Otra opción, con un grado menor de protección sería su inclusión en el inventario de patrimonio cultural de Asturias.

De todos modos Berta Piñan quiso dejar claro que esta protección no impediría que la obra saliese de Asturias. Eso sí, su traslado se debería comunicar al Principado con un mes de antelación. Cultura retiraría entonces la catalogación de la pieza o conjunto de piezas que se vayan a trasladar y solicitaría a la comunidad autónoma de destino que estudie incluirla en alguna de sus figuras de protección cultural.