La Reina Letizia viajó ayer a Reino Unido para, acompañada por Carlos de Inglaterra, príncipe de Gales, visitar una de las mayores colecciones de Zurbarán del mundo y disfrutar de la primera galería de Gran Bretaña dedicada al arte, la historia y la cultura de España. A la Reina la esperaban las autoridades del condado de Durham (noreste de Inglaterra) para mostrarle la colección “Zurbarán. las doce tribus de Israel: Jacob y sus hijos” y asistir al acto inaugural de la “Spanish Gallery of Auckland Castle”.

La colección recoge el espíritu barroco del Siglo de Oro español y lo hace con retratos del patriarca bíblico y sus descendientes, del pintor Francisco de Zurbarán. Las obras son parte de una muestra de retratos a tamaño real con representaciones de los 12 hijos que formaron las doce Tribus de Israel y su padre, el patriarca bíblico Jacob.

La Reina saluda a un grupo de niños que la esperaban. | Efe A. R. / E. P.

Tras visitar la muestra, la Reina presidió la inauguración de la “Spanish Gallery of Auckland Castle”, que cuenta con obras de Zurbarán, Diego Velázquez, Bartolomé Esteban Murillo, José de Ribera, Bautista Maíno o Jerónimo Espinosa. La galería abre con “Benjamín” de Francisco de Zurbarán (1598-1664) porque forma parte de los trece cuadros de “Jacob y sus 12 hijos”, de enormes proporciones, que Zurbarán pintó hacia 1640 en su taller de Sevilla. Doce de ellos están colgados en el gran comedor del castillo de Auckland, después de que Richard Trevor, quien fuera obispo de Durham, los comprase en el siglo XVIII.

El castillo que alberga la colección y la galería es un magnífico palacio episcopal ubicado en el corazón de la localidad de Bishsop Auckland y es la piedra angular del denominado “proyecto Auckland”, integrado por varios puntos de interés histórico y cultural, cuyo objetivo es atraer turistas y apoyar la regeneración del lugar, una comarca en la que pesa un gran pasado industrial vinculado a la industria del carbón. De hecho, incluso el palacio dedica otro espacio a un museo del arte de los mineros.

El príncipe de Gales besa la mano de la Reina.

Detrás de todo está la iniciativa privada de Jonathan Ruffer, abogado londinense y filántropo, que en 2012 adquirió la propiedad del castillo que había sido la residencia del Obispo de Durham. Con este proyecto, Ruffer, que lleva invertidos varios cientos de millones de euros, busca incentivar la recuperación económica de esta región que sufrió un importante declive económico y social a raíz del cierre de la minería del carbón en los años 80.