Hugo Fontela desvelará este jueves su obra más reciente. Será en la galería Marlborough de Barcelona, donde el artista asturiano presenta la exposición “Green Paintings”, una muestra con siete obras de gran formato llamada a marcar un hito en su producción.
Con unas dimensiones mayúsculas (los óleos sobre tabla, tres en total, tienen las mismas medidas, 265,5 por 200 centímetros, mientras los óleos sobre papel, cuatro, superan ampliamente los dos metros en su lado más largo), estas “Green Paintings” evocan la naturaleza, pero también plantean un recorrido por la sinuosa frontera que separa la abstracción de la figuración.
“Me interesa profundamente indagar en las posibilidades que la pintura me ofrece. No creo que se pueda hablar de pintura figurativa o abstracta, sino de la dimensión de la pintura misma. Es de ese lugar de donde sale esta serie de pinturas verdes, sobre las que ni yo mismo puedo dirimir de qué se tratan o que pretenden ser. Solo sé que ellas son mi idea de la pintura hoy”, reflexiona Fontela.
Àlex Susanna, director de la Fundación Vila Casas y autor del texto que acompaña el catálogo de la muestra, considera que en esta nueva serie de Fontela “ha aparecido el misterio intrínseco al acto creativo, se ha encarnado en cada una de estas obras, hasta el punto de que esas aguas, cielos o vegetación lujuriosa se funden y confunden entre sí para afirmar tan solo su realidad al margen nuestro. No hay que desentrañar ningún enigma: se trata de obras cada vez más soberanas y por ello irreductibles”.
“Fontela aspira –ahí es nada– a que todas sus obras sean plásticamente autónomas”, continúa Susanna, “es decir, que tengan vida propia e implosionen en cada espectador: también él tiene que esforzarse en entrar en este mundo hecho solo de signos, sintaxis y ritmos plásticos. Un mundo más recreador que evocador, aunque las apariencias engañen”.
En relación a sus propias obras, Hugo Fontela asegura que “a veces buscan encontrar la vena descarnada y erótica de la pintura, otras son más contemplativas, aunque en algún punto parezca que esas aguas o esos cielos o esa vegetación exuberante y a la vez pobre y castigada te engulla. Lo que he querido es pintar, pintar esa vida y esa emoción casi ancestral que sentimos al contemplar la naturaleza, y nada más”.
“Green Paintings” se inaugura este jueves en la galería Marlborough, donde la serie permanecerá expuesta hasta el próximo 25 de junio.
