"A los jugadores les pongo un 10, sin duda". Rubén Biempica da un sobresaliente en trabajo y esfuerzo a los jugadores del Sporting. El preparador físico rojiblanco destaca las buenas sensaciones que está dando el equipo en la parcela de la que es responsable y subraya uno de los datos que maneja como prueba de la fortaleza pese a la exigencia de ser el único conjunto de Segunda inmerso en dos competiciones, Copa y Liga. "En metros recorridos siempre estamos por encima del rival. No hay una relación directa entre correr y ganar, pero el nivel es bueno", asegura antes de mostrar su convencimiento de que esta línea se continuará en la segunda vuelta. "La plantilla es larga y eso es una ventaja. Estamos en condiciones de competir hasta la promoción", afirma.

"Estamos aquí para competir y es bueno estar vivos en la Copa del Rey además de la Liga. El principal problema es que pierdes un poco en calidad de entrenamiento, pero el estímulo de competición es el de mayor impacto", subraya Biempica, que comparte la sensación de José Alberto sobre que esta intensa carga de partidos permite tener a toda la plantilla en guardia. Y es que el gijonés da mucho valor a este último aspecto, algo que no duda en enfatizar nada más que concluye el primer entrenamiento de los asturianos en Valencia para preparar la vuelta de los octavos de Copa. "Lo que necesito es ver a la gente enchufada", repite.

El preparador rojiblanco desliza la responsabilidad añadida que supone hacerse cargo de un equipo con la temporada iniciada en una tarea tan específica como la suya. "Este equipo no tenía carencias físicas, pero había ciertos sectores como el trabajo de fuerza y los estímulos neuromusculares que es bueno empezar desde cero", argumenta. No tiene duda de que durante la parte final del campeonato se verá al Sporting intenso que tanto agrada a El Molinón y a su entrenador. "No hay ningún motivo para pensar que no vaya a ser así. Necesitamos gestionar bien los esfuerzos en las dos competiciones, pero si quieres ser futbolista profesional, tienes que estar preparado para esto y para más. Sólo hay que ver a los jugadores de élite, que combinan Copa, Liga, competiciones europeas y encuentros de la selección", sostiene el gijonés.

Rubén Biempica disfruta de su segunda etapa como preparador físico del Sporting. La primera fue durante la década de los 90, siendo responsable de esta parcela en el primer equipo, junto a los técnicos Ricardo Rezza, José Manuel Díaz Novoa, Benito Floro, Miguel Montes y José Antonio Redondo. "Cuando todo esto se vino abajo hace muchos años, quizá el fútbol fue un poco injusto conmigo. Igual está feo que lo diga, pero hacía bien mi trabajo y estaba muy identificado", comenta sin ocultar cierta rabia. "Era una especie de espina clavada que tenía", admite el hijo de Rafael Biempica, uno de los históricos del conjunto gijonés, sobre su deseado regreso al club. Volvió en 2013 para trabajar con la base y ha vuelto al primer equipo de la mano de José Alberto López. "Es una segunda oportunidad que me ha dado la vida. Estoy encantado de estar en el equipo de mi vida", concluye.