El Sporting y Marco Canal volvieron a encontrarse ayer en los juzgados para resolver el litigio abierto por la indemnización del gijonés tras su salida del club en 2017. Canal se presentó acompañado de Pablo Díez, miembro del gabinete Mazón y Asociados, que le representa jurídicamente, mientras que la entidad rojiblanca acudió encabezada por Ramón de Santiago, consejero y asesor jurídico del Sporting. El juicio, tras fracasar el acto de conciliación, quedó visto para sentencia y el veredicto podría conocerse en unos diez días. El abogado de Canal reclama una indemnización cercana a los 227.000 euros.

La diferente interpretación de los años de vinculación de Marco Canal al Sporting separan al que fuera trabajador rojiblanco y al club a la hora de fijar la fórmula y el importe de la indemnización que corresponde al gijonés. El abogado de Marco Canal defiende que llevaba trabajando en Mareo desde el año 2000, mientras que la entidad gijonesa no está de acuerdo en esa fecha a la hora de tener en cuenta su antigüedad, acogiéndose además a un último contrato para descartar que su salida se tratara de un despido improcedente. Y es que Marco Canal, tras la marcha de Abelardo y todo su cuerpo técnico, continuó trabajando en el Sporting, y fue al finalizar la temporada 2016-17 cuando concluyó su etapa en el conjunto gijonés.

En una situación parecida se vio involucrado Isidro, expreparador de porteros del Sporting, cuya indemnización también acabó resolviéndose en los juzgados tras fracasar los actos de conciliación. Isidro, también representado por Mazón y Asociados, llegó contar con una sentencia favorable en la que se le otorgaba el derecho a recibir una compensación por la rescisión de su contrato cercana a los 300.000 euros. Posteriormente, el Tribunal Superior de Justicia rebajó esa cantidad a 30.000 euros en un auto ante el que no cabía recurso.