El Sporting ha ejecutado automáticamente la renovación de Gaspar hasta 2024. El canterano, uno de los partícipes del gran inicio de temporada que está protagonizando el conjunto dirigido por David Gallego, pasará a tener ficha profesional la próxima temporada. A efectos contractuales, el club rojiblanco tenía hasta el pasado 30 de junio de 2020 la opción de comunicar al jugador el derecho a no aplicar esa renovación. El hecho de haber omitido esta comunicación, al ser Gaspar un jugador que ya debutó la pasada campaña y al que los técnicos valoran como un futbolista con un crecimiento importante, compromete a ambas partes a prolongar su compromiso tres años más con las condiciones firmadas previamente e incluyendo su salto al primer equipo a partir de la temporada 2021-22. Este vínculo es común entre la mayoría de jugadores del filial, con algún matiz en casos puntuales.

Gaspar seguirá vistiendo de rojiblanco tres años más y no será el únicio. El Sporting también tiene atados a varios futbolistas que están en idéntica situación a la del extremo gijonés, bigoleador en la victoria rojiblanca ante el Sabadell en El Molinón. Entre ellos, hay diferencias como la que implica el caso de Christian Joel. En cuanto al guardameta rojiblanco, el club se reserva hasta junio de 2021 el comunicarle si ejecuta o no esa renovación automática que le uniría al primer equipo por tres años más. Detalles contractuales que escapan a la realidad de la satisfacción de la dirección deportiva del Sporting tanto con el trabajo que está realizando el guardameta cubano, como con su proyección de futuro, al que se le valora como una alternativa de garantías para Diego Mariño.