La Nueva España

La Nueva España

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Pablo Pérez, el único que volvió a entrenar entre los jugadores que son duda

Marc Valiente, Saúl García y Mateo Arellano, en un ejercicio. RSG

Pablo Pérez fue ayer la gran novedad en el entrenamiento del Sporting. El canterano rojiblanco volvió ayer a ejercitarse junto a sus compañeros tras superar la gastroenteritis aguda que había sufrido. De hecho, el atacante rojiblanco se vio obligado a guardar reposo domiciliario y no pudo entrar en la convocatoria del partido del pasado domingo frente al Mirandés. Tampoco estuvo presente el lunes, en la primera sesión semanal de entrenamientos para preparar el encuentro del viernes, frente al Tenerife.

Así, todo parece indicar que Pablo Pérez podrá estar a disposición de David Gallego para el encuentro de esta semana, en tierras canarias. Sin embargo, el resto de jugadores con molestias cada vez tienen más difícil su participación en ese partido, tras no haber podido reincorporarse aún a los entrenamientos.

Así, sigue siendo duda Guille Rosas, que hizo trabajo en el gimnasio junto al readaptador, con lo que se encuentra pendiente de evolución. También Víctor Campuzano, que continúa trabajando para superar las molestias musculares que tiene. José Gragera, que también fue baja para el partido de la pasada jornada, trabajó con el readaptador, mientras que Javi Fuego realizó trabajo de recuperación.

Apoyo del filial

A estas dudas se suma la baja segura de Babin, que cumplirá un partido de sanción tras completar el ciclo de cinco tarjetas amarillas. Por ello, para completar el entrenamiento, David Gallego contó con los jugadores del filial Mateo Arellano y Marcos Trabanco, que se sumaron a los jugadores que habitualmente se encuentran inmersos en la dinámica del primer equipo, como Pelayo Suárez.

Compartir el artículo

stats