El Molinón va camino de vivir mañana la mejor entrada de la temporada. La recuperación de la totalidad del aforo invita a regresar a la normalidad de todo lo que rodea al Sporting, con la afición como protagonista. De los grandes días en el municipal gijonés tiene también mucha culpa “Directo a El Molinón”, el nombre bajo el que actúa el servicio de autocares que traslada al campo, actualmente, a unas 30 peñas sportinguistas de toda Asturias, siendo el vehículo de más de un millar de sportinguistas.
“En los años buenos llegamos a llenar cinco autocares”, afirma Emilio Jesús Sánchez, presidente de una de las peñas de más arraigo en la región, La Laguna, de El Entrego. Con actividad desde 1937 y federada en 1982, los viajes a Gijón para ver al equipo han sido, desde siempre, una parte clave en la liturgia de vivir el Sporting. “Actualmente somos unos 200 en la peña. Muchos quedaron por el camín por la pandemia. Llevamos dos años sin cobrar recibo porque no se podía hacer nada. De hecho, todavía seguimos viajando con un bono que pagamos antes de la pandemia”, relata Jesús. Ellos mismos, los aficionados, son los que costean de su bolsillo los viajes, aunque desde esta semana vuelven a contar con el apoyo del Sporting. El club ha anunciado que habrá cuatro entradas por autocar de 50 plazas y dos para minibuses. Las peñas que deseen contar con estas localidades tienen que enviar un correo electrónico a “sportinguistas@realsporting.com”.
Estas entradas sirven para afrontar parte de los gastos de las peñas a través de rifas o sorteos. “Ayuda a enganchar a gente que no es abonada y también a recaudar un poco de dinero. Es fácil ser sportinguista en Gijón, pero no tanto en el resto de Asturias. El club debe encontrar más fórmulas para ayudar a costear estos desplazamientos y echarles una mano”, reclama Jorge Guerrero, presidente de la Federación de Peñas Sportinguistas. Este colectivo aporta una veintena de las peñas que actualmente forman parte de “Directo a El Molinón”. Las diez restantes están vinculadas a Unipes.
“Yo empecé a ser socio del Sporting gracias al autocar que me traía a El Molinón desde La Felguera”, recuerda Adrián Núñez, presidente de Unipes. No todas las peñas usan un único autocar. Las hay que necesitan varios, mientras que otras comparten vehículo. “Muchas ya están consolidadas en estas funciones, pero ojalá que haya más peñas que se animen a sumarse. Sería una gran noticia que se consiguiera recuperar todas las líneas que existían antes de la pandemia”, añade Núñez. Teniendo en cuenta el listado oficial del club, antes de que el covid-19 obligara a paralizarlo todo, estaban en funcionamiento 21 líneas.
“Nosotros salimos del barrio de La Laguna, en El Entrego, para después hacer parada en Santa, Ciaño, Sama y La Felguera”, apunta Jesús Sánchez, abierto a compartir traslado con más sportinguistas. “El ambiente es bueno, la gente pórtase bien. Ahora, con lo bien que está el equipo, se nota incluso hasta más ilusión”, completa.
Desde la peña Mieres del Camino, otra de la más numerosas, pasando por la de Vegadeo o las varias afincadas en Avilés, la Asturias rojiblanca viaja más allá de sus presencias en El Molinón. En la temporada del regreso del público, más de trescientos sportinguistas ya estuvieron en Lezama, se hicieron ver en Oviedo y esperan convertir desplazamientos a Lugo o Ponferrada en territorio de la Mareona. “A ver si esto se normaliza de una vez”, desea Jesús Sánchez, infatigable a sus 76 años, mientras prepara el próximo “Directo a El Molinón”.
