Nueva York, Efe

Una niña latina de 12 años fue sacada esposada de su escuela en Forest Hills (Queens, Nueva York) y llevada a un cuartel de la Policía por haber escrito en su pupitre.

Alexa González garabateaba unas palabras en su pupitre mientras aguardaba la llegada de su maestra de español, el pasado lunes, en la escuela superior 190 en Forest Hills, en el condado de Queens (Nueva York, EE UU). Alexa, que escribió con tinta lavable, según la propia niña, «Quiero a mis amigas Abby y Faith», «Lex estuvo aquí. 2/1/10» y dibujó una carita feliz, fue llevada a un cuartel de Policía cercano, donde estuvo algunas horas, según indicó la madre, Moraima Camacho, en declaraciones que reproduce el diario «Daily News».

«Lloré mucho. Hice dos pequeños garabatos, que eran fáciles de borrar. Haberme puesto esposas era innecesario. Pensé que sólo tendría que limpiarlo», señaló la menor, que hasta ahora había tenido un buen ritmo de asistencia a la escuela, a la que no ha vuelto desde el lunes porque fue suspendida.

El pasado martes, Camacho y su hija fueron al juzgado de familia, donde a la niña se le impusieron, además, ocho horas de trabajo comunitario y un ensayo sobre lo que aprendió de esta experiencia. Camacho, de 49 años, aseguró que están viviendo «una pesadilla», mientras que la Unión de Libertades Civiles de Nueva York condenó el acto.

El Departamento de Educación señaló a través de su portavoz, David Cantor, que la detención de la pequeña Alexa «fue un error», mientras que la Policía indicó que aunque están autorizados para hacer detenciones, «debe prevalecer el sentido común y usar la discreción al decidir si es necesario recurrir a las esposas». La Unión de Libertades Civiles presentó el mes pasado una demanda contra la Policía por las más de veinte detenciones y uso de fuerza excesiva contra niños.