El conductor que atropelló a trece personas en el Rally Príncipe de Asturias en 2012 podría tener que hacer frente al pago de indemnizaciones que suman casi 64.000 euros. Así lo confirmaron las conclusiones definitivas de los letrados de las víctimas en el juicio que se celebró ayer, en la Audiencia Provincial de Asturias.

Los cinco abogados de la acusación mantienen que el acusado, M.G.G., cometió una falta de lesiones por imprudencia, tipificada en el artículo 621.3 y 621.4 del Código Penal. Por ello piden penas que van desde los 6 euros al día durante 20 días, que ascienden a 120 euros; hasta penas de 20 euros al día durante 20 días, que suman 400 euros. Además, según las lesiones de sus defendidos, los letrados piden indemnizaciones que van desde los 5.936 ,84 euros hasta los 34.532,14 euros. Unas cantidades que sumadas alcanzan los 63.513,49; un pago que tendría que asumir el único acusado; y subsidiariamente las compañías aseguradoras del vehículo con el que circulaba y el de la Federación Asturiana de Rallys, al considerar que no realizaron las labores de señalización necesarias para evitar el accidente. La defensa pide la absolución.

Según los testigos, se colocaron en una de las curvas porque no "había ninguna señal que prohibiera la presencia de público a la vista". Las víctimas mantienen que se colocaron detrás de unas cintas que limitaban el trazado del circuito y que ni la caravana de seguridad ni los comisarios les advirtieron del peligro. El coche de M.G.G. perdió el control y se abalanzó sobre ellos.