Parte de la ola de robos sufrida por el occidente de la región en los últimos meses es obra de una banda rumana desarticulada por el equipo de Patrimonio de la Policía Judicial de la Guardia Civil de Oviedo, en el curso de la llamada "operación Rope". Los rumanos, cuatro de los cuales han sido detenidos, se desplazaban periódicamente a Asturias y utilizaban medios sofisticados, como inhibidores de alarmas o walkie-talkies para comunicarse entre ellos con seguridad.

Las detenciones se produjeron ya el pasado mes de febrero, en la localidad madrileña de Alcalá de Henares. La Guardia Civil les atribuye al menos seis robos en polígonos industriales del Suroccidente de la región.

La Policía Judicial de Oviedo inició las primeras investigaciones en enero de 2015, cuando por parte de este grupo de investigación se detectó un aumento en la comisión de estos hechos delictivos, así como el uso de métodos especializados y muy profesionales. La banda, además, sustraía vehículos comerciales para el traslado del material robado en los polígonos industriales.

Las gestiones realizadas por la Guardia Civil permitieron descubrir e identificar la existencia de cinco personas de origen rumano residentes en la localidad de Alcalá de Henares (Madrid), que de forma reiterada y sistemática se dedicaban a la perpetración de robos con fuerza en polígonos industriales. Los agentes pudieron relacionarlos tras diversas investigaciones con desplazamientos al Principado.

Los detenidos utilizaban diversas herramientas para el acceso al interior de las naves. Además de inhibidores de frecuencia para anular las señales de alarma, utilizaban walkie-talkies para comunicarse entre ellos. La banda no sólo se desplazaba a Asturias, sino a otras regiones españolas. Los detenidos causaron cuantiosas pérdidas económicas en los establecimientos robados.

Este mismo grupo delictivo rumano ya había sido desarticulado en el año 2012 por la Policía Judicial de Oviedo, pero logró reorganizarse sin muchos problemas alrededor de sus líderes. Las diligencias instruidas por la Guardia Civil, junto con los detenidos, fueron puestos a disposición judicial.