Trece niños y un adulto murieron al volcar dos botes en un lago de Karelia, región en el noroeste de Rusia, supuestamente a causa del mal tiempo, según los últimos datos ofrecidos ayer por el Comité de Instrucción (CI) de Rusia, que precisó que el doble naufragio se produjo el sábado.

Otras once personas, casi todas niños, lograron salir con vida del accidente que se produjo en el lago Siamozero, según un portavoz del Ministerio de Rusia para Situaciones de Emergencia. Según una fuente policial, entre los supervivientes se encuentra una joven de 16 años que consiguió llegar a nado a la orilla del lago.

Las autoridades de Karelia ordenaron el término de las labores de rescate, después de que hubieran sido recuperados catorce cuerpos. Formaban parte de un grupo de 51 personas que navegaban este sábado en un lago a bordo de embarcaciones. Entre ellos había adolescentes de 12 a 15 años con acompañantes. Por la noche, los niños que se encontraban en dos botes se vieron atrapados en una tormenta. Como resultado de la tragedia murieron 15 niños, informa "TASS". Nueve menores y dos adultos fueron rescatados, informó el servicio de prensa del centro regional del Ministerio de Emergencias.

"Había tormenta. Se había dado con antelación, por SMS, el aviso de malas condiciones meteorológicas", aseguró un portavoz de Emergencias. El alcalde de Moscú, Serguei Sobianin, indicó que los niños que perecieron en las aguas de Siamozero era moscovitas y se hallaban de vacaciones en un campamento de verano.