Un asturiano se encuentra entre los 102 detenidos de la "operación Pilumnus", una macro-investigación desarrollada por la Guardia Civil en 36 provincias españolas, con 92 registros y la intervención de 450.000 archivos pedófilos de gran dureza. En la operación han participado durante meses 136 agentes, reforzados con otros 200 en las últimas fases del operativo. Los detenidos han pasado a disposición juidicial y tres de ellos han sido enviados a prisión, uno de ellos un exhibicionista que actuaba cerca de parques y colegios. Se ha logrado identificar a diez menores que estaban siendo explotados sexualmente.

Entre los arrestados se cuentan un hombre que grababa los abusos a ocho menores en una pequeña localidad balear, un canario que filmaba los genitales de niños en la piscina o la playa de un hotel, dos gaditanos, padre e hijo, que consumían y distribuían archivos pedófilos, un monitor de natación, un sevillano que grababa con cámara oculta a la hija de su pareja o un granadino que tenía cientos de imágenes y vídeos de abusos a menores latinoamericanos o asiáticos, algunos con escenas de bestialismo.

La operación ha sido desarrollada en las provincias de Alicante, Almería, Cataluña, Barcelona, Bilbao, Burgos, Coruña, Algeciras, Cádiz, Ceuta, Córdoba, Castellón, Canarias, Granada, Huelva, Huesca, Baleares, Jaén, León, Logroño, Madrid, Málaga, Murcia, Navarra, Oviedo, Pontevedra, Santander, Salamanca, Sevilla, San Sebastián, Tarragona, Tenerife, Toledo, Valencia y Valladolid.

La investigación se inició tras el rastreo diario que realiza la Guardia Civil en Internet obteniendo el conocimiento de usuarios de redes de intercambio de archivos, que son detectados descargando archivos explícitos de abusos sexuales a menores y que son localizados en las diferentes provincias donde se han llevado a cabo las detenciones de los implicados.

Para lograr la identificación de los detenidos se tuvo que analizar más de 6.000 archivos explícitos de abusos sexuales a menores con la confección de 120 informes técnico-periciales, así como la coordinación con más de 100 juzgados de instrucción que entendían de los hechos investigados.

Tras realizar el análisis forense del material intervenido se pudieron localizar miles de archivos de contenido explícito en el que se mostraban los abusos sexuales a menores y que acreditaban la participación de los detenidos en los delitos de la tenencia y distribución de los mismos a través de Internet.

Hasta el momento se ha logrado identificar a 10 menores víctimas de abusos sexuales, continuándose con las labores de identificación con el fin de esclarecer el mayor número de los delitos contra menores que se están investigando.