Agentes de la Policía Nacional liberaron ayer a siete mujeres que estaban siendo explotadas laboralmente dentro un operativo en el que detuvieron a cinco miembros de una red criminal responsable de la trata de blancas, integrada por españoles y nicaragüenses. Los arrestados, dos de los cuales fueron enviados a prisión por el juez, estaban "perfectamente estructurados" y dividían su actividad delictiva entre la fase de captación en Nicaragua y la de transporte y alojamiento en España. La red compraba a las víctimas un billete de avión a París y de allí iban a Bilbao y finalmente a Sevilla.