Muchos consumidores no tienen demasiada paciencia. Y menos si están esperando por su comida. Algo así sucedió hace varios días en un restaurante de McDonalds situado en Irlanda. Según relata el periódico Linconlnshire una de los trabajadoras de este establecimiento de comida rápida tuvo que vivir hace días una de las escenas más lamentables de los últimos años. Al parecer una clienta adolescente que no estaba satisfecho con la rapidez del pedido que había realizado acabó escupiendo, pateando y dando varios puñetazos a uno de los empleados del establecimiento. La historia acabó haciéndose viral y dándose a conocer gracias a la denuncia de la hija de la empleada en redes sociales.
Al parecer a la mujer se le habían acumulado los pedidos en el establecimiento y pidió un poco de paciencia a quienes estaban esperando por la comida. Algo que la acusada no se tomó especialmente bien. Abrió su coche y procedió a agredir a la empleada, que presentaba varios hematomas sobre todo en sus piernas.
La hija de la empleada asegura que en realidad la joven sólo había tenido que esperar entre tres y cuatro minutos.
