Violencia machista
"Papá mató a mamá": la desoladora frase del hijo mayor de la mujer asesinada en Baiona
Un vecino escuchó "gritos desgarradores", pero al ver a otra vecina paseando le restó importancia
Marta Fontán | @martifontan
Tras acabar presuntamente con la vida de su exmujer en presencia de sus dos hijos, de solo 7 y 9 años de edad, Ángel Rodríguez da Costa se subió a su vehículo y llevó a los menores a la casa de su padre –y abuelo de los pequeños– antes de emprender una huida que finalizaría horas después en la comisaría ourensana.
Uno de los niños, el mayor de ellos, según consta en el atestado sobre este crimen realizado por la Guardia Civil, profirió una desgarradora frase ante su abuelo: “Papá mató a mamá”.
Ningún vecino del barrio de Percibilleira fue testigo directo de la agresión mortal sufrida por Beatriz Lijó. Pero los testimonios recabados apuntan a que testigos llegaron a ver alguien junto al coche del detenido, en el lado derecho del mismo, por lo que se presume que ahí estaban los menores cuando ocurrió todo. Después el hombre se subió por el lado izquierdo, el del conductor, y se fue del lugar del crimen.
Aunque no vio lo sucedido, un vecino relató a los agentes que escuchó “gritos desgarradores” si bien al salir y observar a otra residente del lugar paseando de forma normal, no le dio importancia y volvió a su casa.
El presunto asesino no declara
Ángel Rodríguez da Costa no articuló palabra desde que el lunes fue detenido como presunto autor del asesinato de su exmujer Beatriz Lijó Gesteira el domingo por la noche en Baiona. No lo hizo en la comisaría de la Policía Nacional de Ourense donde se entregó a primera hora de esa mañana, tampoco en la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra a donde fue trasladado después ni ayer en los juzgados de Vigo con motivo de su pase a disposición judicial.
“No habla, no gesticula, no reacciona, tiene la mirada fija en el suelo... No fui capaz de hablar con él ni media palabra. Está como ausente, en estado catatónico”, resumió Saúl Vidal, el abogado de oficio vigués que ayer mismo se hizo cargo de su defensa. Ante su estado y tras ser explorado en el Imelga, en donde este profesor de Matemáticas se siguió manteniendo en silencio, los forenses concluyeron que el detenido no estaba en condiciones de prestar declaración.
Y tras pedirlo previamente la Fiscalía, la acusación particular y la defensa, la titular del Juzgado de Violencia sobre la Mujer acordó prorrogar la detención del sospechoso durante 72 horas más y su traslado al servicio de Psiquiatría del Hospital Álvaro Cunqueiro para ser valorado por los médicos.
Emotivo funeral
Emotivo y doloroso último adiós a Beatriz. La misma jornada en que su presunto asesino era puesto a disposición judicial en Vigo, la víctima, Beatriz Lijó Gesteira, que tenía 47 años, recibió sepultura en el cementerio municipal de Baiona tras un funeral oficiado en la Colegiata de dicha localidad. Familiares, amigos y otros allegados dieron ayer el último adiós a esta abogada y funcionaria a la que, quienes la conocían, describen como “una mujer de paz” que, pese a la difícil situación que vivía a causa de su exmarido, siempre “huía del conflicto y la confrontación”.
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