La segunda edición revisada y ampliada de "La actividad económica de los/las artistas en España: estudio y análisis", de Marta Pérez Ibáñez e Isidro López Aparicio, resulta más completa que la anterior, con más de 1.105 artistas consultados, contando, en este caso, con el asesoramiento de Juan de Dios Jiménez Aguilera, catedrático de Economía de la Universidad de Granada. Se trata un trabajo esencial, necesario y exigente cuyo propósito es "aproximarse a la situación en la que viven y trabajan los artistas españoles en la actualidad partiendo de su propio testimonio". En esta segunda edición se han incorporado datos de los registros nacionales y europeos de artistas en activo, además de una cuantificación de artistas profesionales en España.
Durante más de dos años los autores profundizaron en las relaciones económicas de los artistas, principalmente con un mercado agónico, y la evolución de la actividad artística antes y después de las crisis de 2008, trazando un documento esencial para conocer la realidad del sector del arte en España.
Algunos datos son tan significativos de la precariedad laboral que el 63,8% de los artistas declaran que sus ingresos por actividad artística supone entre el 0 y el 20% de sus ingresos totales, para otro 10 % representa entre un 10 y un 40%; por tanto nos encontramos con un 73,8% que no puede vivir de su actividad y solo un 14,8% de los artistas encuestados declara mantenerse exclusivamente de su actividad como creadores. De este reducido grupo, el 39,4 % declara unos ingresos inferiores a 8.000 euros anuales, el Salario Mínimo Interprofesional. La mayoría, el 30,3%, son autónomos y el 28,8% se encuentran en situación de desempleo. Con estos datos la situación de los/las artistas españoles es realmente preocupante, llevando una vida de subsistencia.
El 83,9% han participado en exposiciones en los dos últimos años, frente al 16,1% que no han realizado ninguna muestra. Las exposiciones se llevaron a cabo en el propio local o estudio del artista en un 12,3% de los casos, en espacios alternativos en un 48,7%, en galerías de arte en un 47,6%, en salas de exposiciones (bancos, centros culturales) en un 50,6% y en museos o instituciones artísticas en un 48,9%.
En su relación con las galerías solo el 16,3% mantiene contratos por escrito frente al 83,7% que se relaciona mediante acuerdos verbales. El 31,8% mantiene relaciones estables con la galería o el marchante frente al 68,2% que son esporádicas. El 19,4 % de los artistas vende su obra por un precio medio inferior a 100 euros, el 25,4% se mueven en una horquilla entre 100 y 500 euros, el 17,9% entre 500 y 1.000 euros, el 31,3% entre 1.000 y 5.000 euros y una minoría del 6% alcanza una cotización superior a 5.000 euros.
El 80,5% de los artistas encuestados tiene perfiles activos en las distintas redes sociales, el 63,5 % mantiene su página activa, el 42,5% gestiona su propio blog y el 1,9% contrata para mantener sus canales de comunicación. "Un artista - como señalan en el documento- del siglo XXI que está llamado a asentar las bases del futuro próximo, que ya se ha convertido en un agente más a tener en cuenta, un agente con capacidad de prescribir y de definir nuevas estrategias".
Un documento, en definitiva, esencial para cualquier interesado en el sector artístico que se puede adquirir como libro en papel o descargar en formato ebook, por un módico precio, en https://ecosistemadelarte.com/2018/07/18/ 2da-edicion-economia-artistas. Leerlo es tocar las miserias y heridas del arte en España, encontrase con la realidad de un creador que soporta la estructura del sistema sin apenas beneficios, con un artista que merece un mayor compromiso por parte de la Administración, de la sociedad en general y, sin embargo, se encuentra prácticamente desasistido.
