El histórico Cánicas, camino del centenario de su fundación -existen documentos gráficos del año 1923, en el campo de fútbol denominado en aquella época Malzapato, en Llanes- quiere reverdecer laureles y tratar de salir del "pozo" de la Segunda Categoría en el que está sumido desde hace varias temporadas. Así, en la presente campaña 2019/20, la entidad que preside Arturo Redondo Cabeza, parece decidida a apostar por darle brillo al plantel Regional con el objetivo de pelear por el ascenso, aunque no será un camino de rosas.

La realidad es que, el pasado domingo, arrancó la competición liguera en el Nuevo Santa Cruz de Cangas de Onís, con un Cánicas AC muy remozado y caras bastante conocidas -caso del guardameta Luismi Solís Carrio, que llegó del CD Llanes, de 3ª División; el centrocampista Chicho, ex del Ribadesella CF y Urraca CF, también en 3ª División; Miguel Ángel Mateos, ex del Urraca CF, igualmente en 3ª División; o Riki, éste procedente del Ribadesella-. Todos ellos jugadores con experiencia y que atesoran mucha calidad, Sin duda, un bonito reto en una histórica entidad.

Al frente del primer plantel del Cánicas AC se encuentra un técnico que cuajó buenas temporadas en el futbol-base, el curso pasado en el Arenas del Sella (2ª Juvenil) y que ahora tomó el mando el Regional de Cangas de Onís con mano firme. Como coordinador del club, otro viejo conocido del mundillo del balompié comarcal, Luis Sarmiento González, "Luisón", con varios ascensos a sus anchas espaldas, como técnico, en diversos clubes del Oriente de Asturias.

De momento, se vuelve a sentir "hambre" de balón por la vieja capital del Reino de Asturias y la nueva hornada de jugadores parece haber animado a la aletargada afición para regresar al Nuevo Santa Cruz y disfrutar, cada jornada liguera, de los hazañas de los "cachorros" del Cánicas AC. Resta mucho trecho por recorrer, pero las sensaciones son bastante halagüeñas. Y eso que el esférico acaba de echar a rodar en la siempre difícil y dura Segunda Regional