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Historia de una habitación vacía

La delicada y certera prosa de Julia Navas Moreno en un relato que gana al lector desde la primera línea

Historia de una habitación vacía

La cercanía de esta historia y de esta voz nos envuelve y seduce desde sus primeras páginas, pues quien narra y escribe, posee ese talento necesario para contar historias, ese poder evocador que nos transforma en protagonistas de una historia que sentimos como propia y unos personajes que nos alcanzan de un modo tan certero y próximo que pasan a formar parte de nuestros días. Esas lecturas que se adentran en nuestra piel desde el inicio, viviendo cada tropiezo, cada amor, cada pasión, cada desenlace? Es esta una historia en apariencia cotidiana pero que el azar va transformando y modelando hasta límites insospechados. Esta historia y estas vidas, el destino, exige de estos personajes el máximo esfuerzo, valentía y coraje para afrontar una serie de decisiones que no solo condicionan sus vidas sino también de todo su entorno.

No es solo una historia de amor esta que se describe, de un hombre cualquiera con una habitación vacía que en un momento determinado parece encontrar a la persona exacta para darle vida, es esta una historia de vidas cruzadas -también límites-y de decisiones difíciles, de amistad: las luces y sombras que conlleva toda vida. Se quiebra aquí la rutina a cada paso, con giros inesperados, una vuelta de tuerca de realidad que permite encontrar el paraíso junto al infierno y que tensa la cuerda de cada vida y vivencia para mostrar la mayor luz o la mayor oscuridad que habita en nosotros y por tanto en cada uno de los personajes que transitan esta historia. Es la figura de una mujer y su lucha por sus principios, su batalla moral la que sustenta, alimenta y fuerza al protagonista a crecer y mostrarse firme a la vez que vulnerable ante un amor puro que tal vez pueda vencer cualquier obstáculo o tal vez ser devorado. Al igual que los protagonistas de La fille sur le point de Patrice Leconte su suerte anida en su unión misma, en haberse conocido: ese milagro.

La escritora asturiana Julia Navas Moreno nos muestra de nuevo en esta obra esa doble faceta de poeta y narradora que nos ofrece una prosa delicada pero certera, una tensión argumental que nos mantiene enganchados desde su inicio firmemente anudada por una extraordinaria belleza y calidez en su escritura: "¿Y qué hay en mi habitación vacía? En mi habitación vacía había dudas rasgando los acordes de una guitarra olvidada en una esquina. Había desidia y desilusión aderezada de una demoledora nostalgia. Había ansia de amar y ser amado; ganas de huir de ese espacio que se empeña en atraparme y convertirme en una mota de polvo más." Aquello que tan bien definió Raymond Carver, considerarme amado, ser amado en la tierra?

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