Tras el pleno celebrado la semana pasada en el que se debatió el estado de las aguas de nuestra bahía, la alcaldesa tuvo una ocurrencia: "Frivolidad fue que un concejal del PP -en alusión a quien esto escribe- fuera a recoger muestras del agua con un bote de orina.
Pero si a la alcaldesa no le pareciera suficiente argumento, puedo remitirla a las "normas de envío de muestras de agua" establecidas por el laboratorio del COF de Orense (Colegio Oficial de Farmacéuticos de Orense). Y entre las indicaciones que se dan, destaca una para el caso que nos ocupa. Cito textual: "El envase de recogida de muestra debe ser de plástico estéril, de boca ancha, con capacidad mínima de 1 L y cierre hermético (por ejemplo envases de recogida de orina de 24 horas)".
Hago esta aclaración para que los gijoneses bien intencionados no saquen conclusiones equivocadas de una frivolidad: la de hablar por hablar sin tener claro qué se dice, o la de hacerlo con mala intención solo para causar daño. La muestra de agua fue recogida de la mejor forma posible para permitir un análisis profesional, y sólo con la intención de aportar rigor a un debate que el actual equipo de gobierno no se ha tomado con seriedad.