Presuntamente? Es absolutamente maravilloso. Tú dices presuntamente y puedes afirmar lo más grande de cualquiera. Esto lo he aprendido en parte de la tele, en la que periodistas y demás personajes de la farándula anteponen la palabreja a cualquier afirmación para que los tribunales no se ceben con ellos ante las demandas que aquí pone todo quisqui. Y con el "presuntamente" uno puede levantar injurias, calumnias y demás falsedades, que nadie podrá decir nada. Quizás ahora, que estamos volviendo del revés el Código Penal, podíamos introducir la dichosa palabra como demandable, porque aquí la justicia iba a conseguir un montón de euritos que podrían venirle requetebién a este gobierno que ya no sabe qué hacer para poder sufragar las grandes novedades que va proclamando. Esas que anuncian a bombo y platillo, pero para las que no hay ni un euro. "Presuntamente" ya se ocuparán de sacarlo de donde se pueda, es decir, de los trabajadores normalitos, de esa famosa clase media, a la que desde luego presuntamente no respetan algunos miembros del gobierno a los que se les llenaba la boca llamando "casta" a un tipo de gente de la que ahora, hay que ver cómo es el tiempo, ya forman parte. Así que del presuntamente pasamos al "cariñosamente" con el que nos despertábamos esta semana.

Presuntamente nuestro Rey emérito don Juan Carlos le donó "cariñosamente" a su "amiga" Corinna la friolera de 65 millonejos de euritos, seguramente como pago a su total discreción. Es un tema importante, porque hablamos del que fue nuestro Rey, en aquel momento aún lo era, y todos tenemos derecho a saber de dónde, por qué y en qué circunstancias se produjo esa donación. Un tema, por cierto, que dará mucho que hablar y sobre todo será una magnifica cortina de humo para esconder "presuntamente" los tejemanejes que se trae este gobierno y sus aliados para contentar a los catalanes y que nuestro presidente siga siendo, durante algún año más, el rey del mambo. Precisamente las donaciones, esas que el Rey Juan Carlos prodiga tan generosamente, han subido exponencialmente en muchas comunidades autónomas, habida cuenta de los impuestos, por ejemplo en Madrid, que para contentar a los catalanes, impondrá sobre las sucesiones o herencia la señora Montero, dejando también a los ciudadanos madrileños sin defensa ante la vergüenza de saber que tu dinero, ganado con años de lucha y de ahorro, no podrá ser disfrutado por tus descendientes porque por el medio, como nos pasa en Asturias, estará "papá Estado", que además de quedarse con gran parte de tu trabajo día tras día, también se queda con el ahorro que quieres dejar a tus hijos. Ahorro, que vale más que dones, aunque no sean ni de lejos esos 65 milloncejos que Corinna y su hijo disfrutarán, para evitar que cuando te llegue la hora, tus hijos se acuerden de ti, por no haber hecho las maniobras adecuadas evitando, por ejemplo, como en muchos casos, que tengas que renunciar a la herencia porque no puedes pagar lo que te exige la fiscalidad. Qué lástima no tener un rey que nos done "cariñosamente". Ser plebeyos es lo que tiene.