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El Puentón

Orgullo gaitero en Cangas de Onís

Un premio para cerrar el año del décimo aniversario de la banda

Se cierra 2019, apenas quedan unos días para Nochevieja, y antes de que se agote quiero reconocer la impagable labor que ha venido desarrollando a lo largo de la última década la Banda de Gaitas "Ciudad de Cangas de Onís", dirigida desde su fundación por Jesús Miguel Gómez Pellico. Y es que, como colofón a su décimo aniversario, acaba de ser agasajada por el Centro Asturiano de Madrid con el premio Urogallo Festejos Populares-2020, merced, en este apartado concreto, a su buen hacer en materia organizativa, además de anfitriones, del Festival de Bandas de Gaitas "Ciudad de Cangas de Onís", evento que se ha ganado, edición tras edición, un justo y merecido prestigio como promoción de la música tradicional asturiana.

El 7 de septiembre, víspera del Día de Asturias, el X Festival de Bandas de Gaitas "Ciudad de Cangas de Onís", resultó todo un éxito con más de 800 personas deleitándose en la Plaza Camila Beceña, con la actuación de la Banda de Gaitas "El Centru", de Madrid; Conceyu Llangréu; Lus Yerbatus, de Bimenes; Conceyu Candamo y la anfitriona "Ciudad de Cangas de Onís".

Asimismo, participó la Agrupación Folclórica Picos de Europa, bailando la "Muñeira de Tormaleo"; y el Coro Peña Santa-Ramón Prada, entonando la habanera "La Capitana". Y para remate, se tributó un emotivo homenaje a María Rosa Quero "La Pastorina", la gran embajadora de la tonada astur.

La Banda de Gaitas "Ciudad de Cangas de Onís" echó a andar, oficialmente, en el pregón de las fiestas patronales de San Antonio de Padua, allá por junio del año 2009, en el Teatro Colón de la vieja capital del Reino de Asturias. Una de sus decisiones más acertadas en aquellos primeros compases musicales de la citada agrupación vino a ser el nombramiento de Dominico Foyo Berdayes, más conocido como Minico -fallecido en 2013-, como padrino de honor de la susodicha banda de gaitas. Sin lugar a dudas, una de las mejores decisiones que tuvieron, sobre todo al tratarse de un cangués de pro, amante del folclore y de la música tradicional.

Para nada voy a rememorar la larga lista de actuaciones llevadas a cabo por la Banda de Gaitas "Ciudad de Cangas de Onís", a lo largo de estos diez años, sin olvidar el Festival Intercéltico de Lausana (Suiza); para nada quiero mencionar a todos y cada uno de los integrantes, chicos y chicas, que han paseado con sus gaitas por escenarios de infinidad de ciudades de este país. El prestigio se cosecha día a día, actuación tras actuación. Por ello, con su trabajo y entrega, han sabido ganarse el respeto de la gente, amantes o no de la música tradicional asturiana. Y, hoy en día, son orgullo para infinidad de cangueses y canguesas, tanto para los de aquí como para aquellos que residen lejos de la tierra que les vio nacer.

Diez años no son nada para una agrupación musical. Cierto es que hay pros y contras durante ese periodo de tiempo; altos y bajos; instantes halagüeños y otros no tanto. Eso sí, mientras al frente, como timonel, esté un director tan comedido y profesional, a la vez que exigente, como Jesús Miguel Gómez Pellico las expectativas de seguir creciendo están, al menos, en el buen camino. Lo bueno suele valorarse más lejos que en su propia casa. Pero, dicho esto, me congratulo como cangués de poder disfrutar de una excelente Banda de Gaitas, la nuestra, la que porta bordado en su estandarte el nombre "Ciudad de Cangas de Onís".

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