Quedan pocos meses para el estreno. El año pasado y después de intentar programas propios como la Casa Fuerte Telecinco prometió que volvería la casa de Gran Hermano Vip. Y por eso ahora muchos se preguntan quien podría entrar en esta aventura.

La hija de Guti y Arancha de Benito, Zayra Guiterrez, confesó hace días que nunca iría a Supervivientes a pesar de que Telecinco la tanteó debido a lo polémica que suele resultar la joven. Pero ¿y a Gran Hermano Vip? Ahí la joven tiene claro que diría que sí por lo que muchos dan por hecha su participación más teniendo en cuenta que Mediaset necesita de forma urgente famosos que llenen la casa y que den polémica para que el desembolso económico que supone la vuelta de este formato compense de alguna manera con unos niveles de audiencia que estén a la altura de la circunstancias.

Gran Hermano ha sido desde siempre uno de los formatos preferidos por la audiencia y, por extensión por lo tanto, de los programadores de Telecinco. El principal canal de Mediaset empezó su romance con este formato hace más de dos décadas, cuando estrenó su primera edición. Luego hicieron versiones VIP que fueron mejor acogidas por la audiencia y que acabaron, año a año, sepultando al programa original.

De hecho muchos de los que fueron concursantes de reality y algunos de los que lo ven al otro lado de la pequeña pantalla llevan tiempo pidiendo que este formato vuelva en su versión de anónimos, ya que era muy valorada. Y es que esta versión de gente no conocida no sólo servía para que el público viera a gente de la calle (de lo más raro en alguna que otra ocasión) sino que también servía a Mediaset de “cantera” para buscar nuevos famosos de todo tipo. No en vano los concursantes que conseguían ser los más famosos del lugar luego se convertían en carne de cañón el programas como Supervivientes o Gran Hermano Vip.

Telecinco tuvo que suspender durante varios años la emisión de Gran Hermano después de que un juzgado emitiera una orden de investigar una violación que tuvo lugar dentro de la casa más vigilada de la historia de la televisión. Un boicot de anunciantes orquestado a través de una página web obligó a la principal cadena de Mediaset a tomar esta decisión.