Se acabó. La 75 edición del Concurso Hípico de Gijón se cerró ayer con algo menos de público que en las ediciones anteriores y movimientos parecidos en las taquillas de apuestas.

El concurso no empezó bien porque el primer día llovió de manera intensa y eso afectó a la afluencia de espectadores y por tanto a las apuestas. Los apostantes tardaron en cogerle al tino a los participantes hasta el punto de que las tres primeras jornadas no hubo acertantes de la triple gemela y el bote fue creciendo. Tres días seguidos sin acertantes de la triple es algo que no recuerdan los más viejos del lugar.

De ello se aprovecharon dos aficionados en la cuarta jornada, la del pasado sábado, que acertaron la combinación y se embolsaron 14.405 euros cada uno. En la penúltima, y también con un bote importante, hubo cinco acertantes que se llevaron algo más de 5.000 euros cada uno. Si curioso fue que no hubieran acertantes de la triple gemela tres días consecutivos, no menos raro es que una gemela, la primera del tercero día del concurso, tampoco los tuviera.

El concurso finalizó ayer con otros 20 acertantes de la triple, cifra que tampoco es muy habitual. Cada uno de ellos cobraron 648 euros. En el resto de las apuesta también algunas que merecieron la pena. En concreto las gemelas tercera y quinta superaron los 100 euros. La tercera estuvo formada por Laura Roquet y Julia Dallmano mientras que la quinta por Patricio Pasquel y Paola Amilibia. El resto superó los 20 euros a excepción de la segunda en la que la combinación Luis Sabino Gonçalves y Paola Amilibia se quedó en 11.90.

En cuanto a las apuestas individuales, la que más pagó fue la de ganador de prueba que supuso 130 euros para cada uno de los 8 acertantes.

El año que viene más y a ser posible, mejor.