La gastronomía asturiana triunfa y los turistas que visitan Asturias lo saben. Las botellas de sidra, los embutidos, las conservas y sobre todo los quesos son los productos más vendidos a los viajeros por las tiendas del centro de la capital asturiana. La gastronomía se impone a los productos comerciales propios de las tiendas de souvenirs. Los visitantes lo tienen claro: el Cabrales es mejor que cualquier imán.
Casi las tiendas de souvenirs coinciden en que han notado un descenso en sus ventas. "La gente compra solo cosas pequeñas, imanes, llaveros y colgantes, nada muy caro", explican los comerciantes de las tiendas de recuerdos del centro de Oviedo.
Sin embargo, frente al crisis que sufren otras tiendas las de alimentación tienen éxito. "Llevarse unos quesos o unas botellas de sidra es indiscutible", explica Marta Gangoso, una de las comerciantes del Fontán, en Oviedo. Casa Maribel, es uno de los negocios de alimentación más antiguos de la plaza ovetense. Abre 365 días al año para que tres generaciones de la misma familia acerque la gastronomía a los visitantes como el mejor recuerdo del Principado.
"La estrella son los quesos, es lo que más vendemos, pero también vendemos muchas tablas de fabada y embutidos, a los turistas es lo que más le gusta", explican las dependientas. Las conservas y los postres también se convierten en un atractivo, "la gente también nos pide muchos", comentan.
"Triunfan las mismas cosas que todos los años, las que no cuestan mucho". Esta temporada de verano no se ha extendido su éxito a otros sectores. Figuras, imanes, llaveros, camisetas y demás detalles con imágenes del Principado han visto un descenso en sus ventas.
"Este año la gente compra menos y van siempre a lo más barato", explica Margarita Fernández, propietaria de una de las tiendas de recuerdos situadas junto a la Regenta, donde los productos artesanales se mezclan con los más comerciales.
Los imanes y los colgantes son lo más vendido en su establecimientos. La estrella: un imán con la imagen de la Regenta con la Catedral, cuyo éxito se debe a la proximidad del local a la estatua intuye la propietaria. "La gente se lleva 3 o 4 para sus familiares porque no son muy caros y pueden repartir luego", explica Fernández.
Los comerciantes han notado un descenso de las ventas en este verano, "se nota la crisis, julio ha ido muy mal", coinciden. Y, desde su punto de vista, la capital se queda atrás en el turismo. "En Oviedo el ayuntamiento no hace muchos grandes eventos y por eso viene menos gente, en Gijón tienen cosas todos los días", se queja una de las comerciantes. La playa y las fiestas le roban el protagonismo a Oviedo y sus comerciantes piden a la administración que tome medidas.
El mal tiempo y las lluvias de julio se han notado en estos establecimientos, y todos coinciden en que la afluencia de público ha sido mucho menor. Aunque explican, Oviedo recibe más visitantes cuando "no hace día de playa", este año han notado una caída de las ventas, "ha venido menos gente en Asturias en general, pero en agosto estamos empezando mucho mejor", argumentan.
"En el mes de julio ha habido poca gente y ahora en agosto parece que estamos arrancando, pero poco a poco", comenta Petronela Turcu, dependienta de una de las tienda especializadas en camisetas de más éxito en Asturias. Las imágenes del Principado y el humor presente en sus diseños también se han encontrado con turistas que buscan reducir sus gastos a la hora de comprar recuerdos en sus viajes. "La gente más que camisetas ahora se lleva neceseres o monederos, no quieren gastar tanto", explica Turcu.
