Un menú donde el chocolate es el principal protagonista. Esto es lo que ofrecerán esta noche Lara Roguez, chef del restaurante del Acuario, y Fran Segura, uno de los mejores maestros chocolateros de nuestro país. La degustación, formada por cuatro platos salados y cuatro dulces y con el cacao presente en todos ellos, promete deleitar de forma excepcional a los 18 afortunados que consiguieron hacerse con uno de los servicios que hoy tendrán lugar en el interior del Acuario de Gijón y dentro de las actividades diseñadas para promocionar este emblemático espacio de la ciudad.

"Este menú surge de la solidaridad de Lara. Durante el confinamiento hicimos varios directos juntos en Instagram y nos pareció divertido llevarlo al directo", cuenta Fran Segura sobre la original cena. A cerca de su experiencia en unos fogones diferentes a los suyos, el cocinero alicantino asegura sentirse en el Kraken "como en casa", y añade "es mi primera vez aquí , pero espero que sea la primera de muchas".

Por su parte, para Roguez será de las primeras veces en las que el chocolate tenga tanta presencia en sus platos. Cuenta que en su motivación está "ese punto de querer hacer algo distinto y probar nuevas texturas, sabores... y seguro que de ahí acaba saliendo algo incluso para la carta". Sobre el éxito que tuvo la propuesta una vez se abrió al público (no quedan plazas desde hace semanas) la chef asturiana lo atribuye a que "juega mucho el punto de que sea algo diferente, estas cosas no se hacen mucho". Sobre esto el maestro chocolatero también añade "el buen trabajo y el buen nombre del restaurante y de Lara, que goza de un prestigio y un trabajo detrás que ha hecho que la gente confie en ella".

Entre los platos que ofrecerán estarán una raspa de bocarte preparada con cacao, café y más ingredientes originales, o un postre templado de arroz con chocolate, para el que Segura espera contar "con el permiso de Asturias y del arroz con leche".

La cena se servirá en el propio Acuario, algo que en palabras de Segura "implica un poco mas de concentración, pero en el fondo hasta nos favorece para estar más pendientes de lo que cocinamos". De cara al servicio, el alicantino anima a sus comensales "a venir con la mente abierta y el ánimo de disfrutar y probar todo lo que se ponga".