¿Sin planes para el fin de semana? Aún hay tiempo de organizar una escapada al valle del Jerte, en Cáceres (unas 5 horas en coche desde Asturias). Allí están en plena floración los cerezos, un espectáculo de la Naturaleza que este año se ha adelantado algo sobre las fechas habituales. La fiesta -declarada de interés turístico nacional- cuenta con un sinfín de actividades que ya empezaron a mediados de marzo con la primera parte: "Despertar del valle", lo llaman. Hoy se da paso al Cerezo en flor, hasta el 8 de abril, las mejores fechas para disfrutar del manto blanco que cubre todo el valle. Y en los últimos años se ha añadido la "Lluvia de pétalos", otro regalo para los sentidos, cuando los árboles empiezan a perder las flores: del 9 de abril hasta el 6 de mayo.
Lo básico es poder recorrer todo el valle (11 pueblos que se extienden a lo largo de unos 50 kilómetros a lo largo de la nacional 110, entre Tornavacas y Plasencia) para disfrutar de las mejores imágenes. Y esto es posible gracias a las rutas de autobuses gratuitos que se ofertan mañana, y los días 8, 13, 14 y 15 de abril a partir de las 11 horas, con varios servicios al día. En cada pueblo hay una parada, aunque es mejor concretar salidas y horarios en la Oficina de Turismo del Valle del Jerte (Cabezuela del Valle, 927 47 25 58), donde facilitan además el amplio programa de actividades: jornadas gastronómicas, bailes, senderismo, conferencias...
Los amantes de las cerezas deben esperar al menos hasta mayo para probarlas. Hasta entonces siempre se pueden consolar con los mil y un derivados que se hacen de la fruta a la venta en cualquier pueblo: licores, mermeladas, tartas, gallegas... Tornavacas, Jerte, Cabezuela, Navaconcejo, Valdastillas, Piornal, El Torno y Casas del Castañar son los enclaves más populares, y también los más masificados. Merece la pena esforzarse un poco por buscar rincones solitarios desde los que disfrutar del la blanca primavera cacereña.