Limpiar la casa es cada vez más complicado a pesar de la gran cantidad de productos que salen cada día al mercado y que se venden en supermercados y droguerías. Para hacerlo de forma correcta tienes que saber lo que compras y para qué. No es nada sencillo dejar como nuevos espacios en los que vives el día a día: la cocina en la que comes o la habitación en la que duermes acumulan suciedad normal del día a día. Por eso en nuestra sección de decoración te vamos recopilando los diferentes trucos de limpieza que van a hacer tu día a día más sencillo y que te van a permitir ahorrar tiempo en las tareas del hogar. En esta ocasión nos decantamos por las paredes. A veces es muy difícil que estos espacios te queden como recién pintados pero tenemos una “pócima” infalible que puedes hacer en tu propia casa: en un caldero de agua mete un poco de lejía y suavizante.

Te recomendamos que primero apliques la fórmula a una parte de la pared que no sea muy visible. Existen varias variables de esta fórmula. Hay quién, en lugar de lejía, le echa un poco de detergente de lavadora. Después lo más importante es limpiar la zona con una bayeta seca. Los resultados te sorprenderán y dejarán con la boca abierta a cualquiera que te visite en tu casa.

Pero ¿limpiar las paredes es necesario para mantener tu casa a punto y lista para la revisión? El polvo y las manchas se acumulan en determinadas zonas de tu hogar sin que te des casi ni cuenta. Por eso es importante estar atento a todo. Hace unos días te contábamos (en este enlace lo puedes leer) cómo puedes limpiar el horno sin casi esfuerzo. Otra de las zonas de la casa en las que tienes que poner tus esfuerzos de limpieza es la mampara de la ducha. En este otro artículo te contamos hace tiempo cómo puedes dejarla como nueva: sólo te llevará uno segundos cada día.

Lo más importante a la hora de limpiar y de mantener tu hogar a punto es saber en qué momento tienes que hacer cada cosa y cómo puedes hacerlo para que te lleve cuanto menos tiempo mejor. A casi nadie le gusta pasar tiempo con la bayeta pero es algo necesario y que contribuye, además, a tu bienestar y a la salud de los tuyos.