Pete Doherty vuelve a estar en entredicho por la muerte de Robin Whitehead, una muchacha de 27 años miembro de una multimillonaria familia británica, que estaba rodando en Londres un documental sobre el músico y falleció, supuestamente, por una sobredosis de droga. Se teme que la joven falleciera como consecuencia de un cóctel de heroína, crack y Valium tras pasar varios días con el cantante. Robin era hija del cineasta Peter Whitehead y nieta del difunto Teddy Goldsmith.