Tras un intenso trabajo bajo la nieve y con temperaturas gélidas, los equipos de rescate desplazados a San Isidro han localizado la máquina quitanieves que sepultó ayer un alud. Se encontraba rota en varios pedazos y a 200 metros de la carretera, en una zona de muy difícil acceso. El alud sorprendió a dos operarios arreglando la chimenea de la máquina. El cadáver de uno de ellos ha sido localizado y buscan el cuerpo del segundo trabajador.