Pequeños detalles, de escasos milímetros, con los que se consigue sacar en vez de cinco seis dosis. Son las más demandadas en estos momentos y en esta fábrica de Fraga (Huesca) se están fabricando 25 millones de unidades para las comunidades autónomas. Jeringuillas especiales que tienen un espacio muerto muy reducido y llevan la cánula integrada, lo que hace que se consiga aprovechar al máximo las vacunas. Con las convencionales se perdería alrededor de un 15% del fármaco. Gracias a ella, Asturias es de las comunidades que más está apurando el medicamento. Ya ha puesto casi el 94% de las dosis recibidas, aunque ha tenido que aplazar el proceso de vacunación para priorizar la segunda dosis en las residencias. Garantizar la inmunidad es una de las recomendaciones de Sanidad. Y pese al retraso en la distribución de Pfizer, pide dar preferencia a residentes, sanitarios y sociosanitarios, antes de empezar con los mayores de 80 años cuanto antes.