«Los sindicatos han dejado de preocuparse por la clase obrera para convertirse en un grupo de presión a la americana»

<Juan Velarde >

Economista

«A pesar de lo mucho que se ha hablado en la UE del estado social europeo, éste sigue sin concretarse»

<Juan Fernández >

Experto del Principado en la UE

Oviedo, Pablo GONZÁLEZ

El economista Juan Velarde (Salas, 1927) aseguró ayer que Asturias es «un rayo de esperanza sobre el que merece la pena meditar dentro de la situación preocupante del país». Velarde considera que «después de unos años de esfuerzos y sacrificios Asturias ha conseguido sanear su economía y ponerla a la altura de las más competitivas del país». Pero para el Premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales, que ayer participó en Oviedo en la última jornada del ciclo de conferencias organizado por el Centro de Estudios Sella, todo se puede quedar en nada dado que el país se encuentra en la «situación económica más grave de la historia de España. Estamos ante una problema nacional muy serio».

Velarde asevera que el Principado está ante una encrucijada ante la que hay que poner en práctica alguna de las recetas que Jovellanos defendió a finales del siglo XVIII y principios del XIX para garantizar el futuro de la región. Así, Velarde cree que es vital que Asturias sepa «conectarse con otras economías, si no estará condenada, apostar por la tecnología y por una energía barata y abundante. Asturias se encuentra ante un panorama de alternativas y de frenos que si no se saben superar nos pueden llevar al fracaso». Por este motivo apuesta por «tener conexiones ferroviarias serias e importantes, a la vez que rentables. Hay que estudiar mucho si tiene más importancia el AVE o el transporte de contenedores».

Dentro de este diseño Velarde valora enormemente la importancia que puede tener el puerto de El Musel «ante el cambio de los flujos marítimos por el peso que han alcanzado las economías de países como China, India o los de Asia-Pacífico, que se conectan a través del Índico, el Mediterráneo y rodean España». De ahí que la delantera la tomará «quien se conecte mejor a los mercados internos» y quien «cuente con una mejor salida hacia el norte de Europa», que para Velarde es «hacia donde debe mirar El Musel».

Otro pilar sobre el que debe asentarse la región es la generación de energía. «La vocación de exportación de energía de la región es evidente, pero con la red que hay actualmente obligaría a recortes de producción», explicó para defender la necesidad de la construcción de las líneas de alta tensión de Sama-Velilla o Soto-Penagos. Frente a todo esto, la «grave» situación económica del país. Velarde advierte que «si no pagamos la deuda que tenemos con el exterior, que se generó para arreglar la poca competitividad del aparato productivo español, hay crisis garantizada para muchos años».

Velarde piensa que la solución para por llevar a cabo medidas «duras como flexibilizar el mercado de trabajo y bloquear la entrega de beneficios. Otra solución pasa por rebajar notablemente los salarios». Al tiempo, acusó a los sindicatos españoles de haberse «convertido en un grupo de presión más» ya que «han dejado de preocuparse por la clase obrera para defender a quienes tienen un puesto permanente y a quien está afiliado. Algo muy a la americana».

El ciclo de conferencias lo cerró Juan Fernández, asesor del Principado en temas europeos, que repasó el papel de las regiones en la Unión Europea (UE). Para Fernández las regiones europeas tienen más capacidad de influir ante la UE para defender sus intereses «a través de los lobbys y entes que han surgido de manera informal, que instituciones formales como el Comité de las Regiones». Fernández aseguró que «hasta los propios miembros del comité están un poco desencantados porque su trabajo sirve para poco», añadió. Además, lamentó que «a pesar de lo mucho que se ha hablado del estado social europeo, éste sigue sin concretarse».

«El puerto del Musel debe mirar hacia el norte de Europa», recomienda Juan Velarde

«El trabajo del Comité de las Regiones ante la UE sirve para poco», reconoce Juan Fernández